martes, 27 de octubre de 2020

El confinamiento

 Ha sido un época muy difícil, nadie se habría esperado vivir una pandemia, ni mucho menos estar obligados a quedarnos encerrados en nuestras casas durante tres largos meses. 

En un principio fue muy difícil para mi, angustia, agobio y ansiedad constantes. Nos estaban obligando a estar encerrados entre cuatro paredes, fuimos privados de gustos como salir a la calle o ver a nuestros seres queridos, cosas que estando acostumbrados a hacer todos los días, se hacía incluso doloroso que nos lo quitasen. Todos los planes que habíamos hecho fueron a pique y comprendimos que este año no iba a ser otro cualquiera. A parte de la preocupación por contraer el virus que era (y es) constante. Encender todos los días la tele y ver que miles de personas morían y nadie podía pararlo, sentía terror constante por que alguien de mi familia o yo misma pudiese acabar así, que un virus me arrebatase parte tan esencial de mi vida como pueden ser mis familiares o amigos. 

Poco a poco la situación se fue normalizando, era rutina estar con la misma gente y en el mismo sitio todo el día. Fui acostumbrándome poco a poco y cuando conseguí dejar de mirar la parte mala quedaba algo bonito, un momento perfecto para pasar más tiempo con la familia y conocernos mejor. Descubrí nuevos gustos y aficiones. Fui capaz de entender que quizá todo lo que yo tenía como algo malo, no era tan malo y que cosas tan simples como poder tomar un café en un bar por la mañana con mis amigos aporta una felicidad que no comprendí hasta ese momento. Aprendí mucho de mi misma en el confinamiento, a gestionar mis emociones y a vivir las cosas con más intensidad, porque pueden acabar cualquier día. Cuando volvieron a permitir salir a la calle se me hacía incluso extraño, estaba tan acostumbrada a la vida en casa que no tenía ganas ni de salir. 

A pesar de todo lo malo que el confinamiento a traído, ha habido partes buenas y ha creado momentos inolvidables con mi familia. Me ha enseñado mucho y en parte entiendo que era algo que necesitaba, un descanso para conocer y comprender esas cosas de mi misma que antes no entendía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si quieres participar en este blog con tus comentarios, te damos las gracias de antemano por tu interés y sensibilidad.